Control de acceso

El personal de control de acceso es responsable de garantizar la seguridad y el orden en las instalaciones mediante la regulación de entradas y salidas de personas, vehículos y bienes, siguiendo los procedimientos establecidos por la organización. Entre sus principales funciones se encuentran verificar credenciales, registrar accesos, supervisar áreas de ingreso y zonas restringidas, así como identificar y reportar actividades sospechosas o incidentes de seguridad. También debe atender al público, proporcionando orientación y resolviendo dudas relacionadas con el acceso. Este rol implica generar reportes sobre actividades. En situaciones de emergencia, el control de acceso actúa como primer respondiente, siguiendo protocolos establecidos y, en su caso, coordinándose con servicios de emergencia externos. Adicionalmente, se encarga de asegurar el cumplimiento de las normas internas y reportar cualquier conducta inapropiada o incumplimiento. Se requiere habilidades de comunicación, atención al detalle, capacidad para trabajar bajo presión. Este puesto es fundamental para mantener un entorno seguro, organizado y en línea con las políticas de la empresa.